CURACIÓN EN EL ACTO DE PERDÓN
Y LA GRATITUD.
Solo
mediante la practica del perdón y la gratitud podrás mejorar tu vida, sanar tu
cuerpo y tus emociones así como tu mente.
Por favor prueba hacer lo que aquí se sugiere
y pronto comprobarás los resultados.
Primero, revisa la historia para
entender tu propia historia. Desde siempre, tanto la religión como la sociedad,
nos estimularon a perdonar las ofensas y el daño que otros nos infligían, como
así también a pedir perdón por el mal que pudiéramos haber hecho a otros. Nadie
nos han enseñado el concepto de perdonarnos a nosotros mismos por los
sentimientos negativos que guardamos en nuestro interior, tal difíciles de
sanar sin un trabajo comprometido.
Esos sentimientos como el rencor, el odio,
la rabia, los celos y muchos mas que hemos guardado, ya sea por lo que los
otros nos hacían o que pensábamos que nos hacían o nos decían que nos hicieron, se van acumulando y crecen con el tiempo.
Mucho menos nos enseñaron a entender y
perdonar la culpabilidad que todos sentimos por aquello que pensamos le hemos
hecho a otros, consciente o inconscientemente, y que al final nos hacíamos daño a
nosotros mismos, ya que la culpabilidad es el castigo más grande que un ser
humano puede darse a sí mismo. La culpa, según mi opinión, es tanto o más
dañina que el odio, el rencor, la indiferencia y otros sentimientos similares.
El secreto del perdón es Perdonarse uno mismo. Después
de mucho experimentar sufrimiento, mucho por causa de la culpa, he aprendido que
para liberarnos del rencor y el odio, no existe nada ni nadie que lo haga
más que nosotros mismos.
Haz este simple ejercicio: Cierra tus
ojos por un momento y trata de imaginar cuántas emociones negativas has ido
acumulando en el transcurso de tu vida, Piensa todos los sufrimientos que te han
causado con solo recordarlas ahora.
Aunque hayas perdonado a la o las personas involucradas, cada vez que
piensas en ellas, esos sentimientos negativos que vuelven una y otra vez, van produciéndote malestar. En muchos casos, la persona que te ha producido esos
sentimientos, quizás ya ni siquiera la veas, o puede que hasta esté muerta, pero
a ti, el solo recuerdo te lastima y aun sufres por ello.
Eso quiere decir que el mal está en ti
y no en el otro. ¿Entonces cómo puedes deshacerte del mal que te aqueja
perdonando al otro? El verdadero perdón llega cuando te perdonas a ti mismo.
Decide iniciar hoy a perdonarte! Y no
olvides agradecerte por haberlo intentarlo.
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